Quitando las malas hierbas

Para mantener el jardín hermoso tenemos que cortar día a día las malas hierbas, evitando que llegue un momento en que las flores que queríamos no pueden nacer porque otras le quitan agua, que no nazcan ramas nueva que rejuvenezcan el árbol, que no podamos pasar, que aniden animales peligrosos y que el esfuerzo sea mucho mayor.

Eliecer, esta misma tarde en el Hogar.

Al igual que cortamos a diario las malas hierbas para permitir a las buenas nacer, igual pasa con los malos hábitos con los que tenemos que luchar a diario, para lograr que esa personita buena que todos llevamos dentro logre salir. Las rutinas, la disciplina, los hábitos positivos, los horarios, pueden parecer meras imposiciones sin sentido pero con el tiempo ayudan a fortalecer el carácter trabajador, el esfuerzo recompensado, unas buenas calificaciones...

Ahora que se acerca el final de curso, con los exámenes, las evaluaciones y la alegría por acabar otro año y celebrar las vacaciones, nos toca reflexionar sobre los esfuerzos que nuestros muchachos y muchachas hacen todos los días, lejos de sus familias, madrugando, esforzándose por sacar las mejores calificaciones y ayudando en el Hogar sin perder la sonrisa. Pero finalmente, sabemos que merece la pena y lo constatan las becas para continuar los estudios que obtienen nuestros alumnos, los puestos de trabajo que logran y la felicidad de saber que el trabajo está bien hecho.